El girasol necesita medidas urgentes

Autoridades de la Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR), encabezadas por su presidente, Luis González Victorica, en representación de la producción, y referentes de la comercialización, los insumos y la industria aceitera, se reunieron hace pocos días con el Secretario de Agricultura de la Nación, Carlos Cheppi.
“Consideramos que es necesaria una drástica disminución de las retenciones o se empezará a perder la diversificación y el productor se tirará irremediablemente a la soja. Por ejemplo, una reducción de 10 puntos para aceite y pellets significan, para un productor de 22 qq/ha, 80 U$S más por hectárea, que se traducen en aplicación de mayor tecnología y por ende, más rendimiento”, indicó el presidente de la Asociación para destacar que las actuales retenciones fueron impuestas cuando el aceite costaba un 62% más en Rótterdam y se esperaba que siguiera subiendo.
La intención de ASAGIR fue presentarse ante Cheppi como cadena de valor, mostrarle al Secretario los resultados del trabajo de la Asociación y la importancia que tiene el sector girasolero para el país. “Hace más de 10 años que venimos dando pautas e ideas para que el cultivo de girasol tenga la difusión y la promoción que merece, como principal componente del mercado de aceite”, expresó González Victorica.
El segundo objetivo fue analizar junto al titular de la SAGPyA las dificultades que enfrenta el cultivo. El precio del girasol depende hoy en un 90 % del precio del aceite. Cuando pusieron las actuales retenciones fijas (32% para semilla), en noviembre de 2007, el valor del aceite en Rótterdam era de 1401 U$S/t. Había un fracaso de cosecha en el Hemisferio Norte y aún estaba creciendo la "burbuja" financiera que luego llevaría el precio a los 2045 U$S. El valor actual para la posición marzo de 2009 ronda los 865 dólares, contra 1015 del aceite de canola que históricamente costaba 5-6 % menos que girasol. “Todo esto lleva al productor a esperar en la próxima campaña un precio quizás menor a 200 dólares por la tonelada de grano”, consideró el representante de la cadena girasol.
Según el titular de ASAGIR, el encuentro sirvió para que Cheppi y sus asesores conozcan más de cerca la cadena del girasol, sus implicancias y los sectores que mueve. “Le entregamos material referente a los diversos actores que conformamos el complejo girasolero y la dinámica del producto, que moviliza más de 1.300 millones de dólares en la economía nacional”, especificó.
“La depresión del precio ha hecho que el área del cultivo cayera más de un 15%. La reducción de la superficie sojera en beneficio de otros cultivos a la que apuntaba el Gobierno, no se puede dar con el actual nivel de retenciones”, afirmó González Victorica. Y agregó que “si bien la campaña está jugada, pensamos que hay que hacer algo ya, antes de la cosecha, y no esperar a la próxima, porque el productor que vea frustrados sus ingresos no va a volver a entusiasmarse en sembrar girasol, por más que le prometan medidas e incentivos”.
Lo cierto es que ningún productor que tenga girasol guardado querrá vender a los precios actuales. Mientras tanto, la industria tiene plantas paradas: Europa no compra por falta de liquidez y Ucrania y Rusia copan el mercado con su producción de girasol y colza.
Según ASAGIR, durante la reunión, Cheppi señaló que hay consenso en el gobierno de hacer algo por los cultivos y, si bien no lo mencionó explícitamente, la iniciativa sería atenuar el efecto de las retenciones. En esta línea, el funcionario resaltó que se estaban analizando medidas para el trigo y el maíz y que seguramente se iba a incluir al girasol.
González Victorica rescató que “es importante que el Secretario haya convocado a las diferentes cadenas agrícolas argentinas, porque nos permite acercar información específica de las repercusiones que tendrán las medidas que se tomen para cada cultivo”.