El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania continúa generando volatilidad en el mercado internacional de aceites, afirma el informe quincenal que elabora la consultora especializada en agronegoocios AZ Group y, particularmente, para el cultivo de girasol, que está próximo a iniciar su campaña 2022/23, con las primeras siembras en el norte del país.
De acuerdo al análisis, que cita el último informe del USDA (Departamente de Agricultura de los Estados Unidos), en Ucrania, uno de los grandes productores de la oleaginosa, la producción caería caería un 45%, como consecuencia de la fuerte retracción en la siembra: en 2021/22 se sembraron 7,1 millones de hectáreas y en 2022/23 llegaría a las 4,6 millones, el área más baja en 10 años.
En Rusia, por su parte, también se espera que la producción disminuya 6,9% en comparación al ciclo anterior.
De acuerdo al trabajo de la consultora AZ Group, para la Argentina, el USDA estima que la producción para la campaña 2022/23 se incrementaría a 4,2 millones de toneladas. Esto significaría 25% más que el año pasado y el más elevado desde la 2007/08.
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Asimismo, según datos del INDEC, durante el primer cuatrimestre el 2022 se exportaron 238 millones de toneladas de aceite de girasol, el volumen mas elevado desde la campaña 2016/17 y 92 millones de toneladas mas que el ciclo anterior.
En cuanto a las cotizaciones para el girasol disponible, dice el análisis, en las últimas jornadas se incremento considerablemente su valor, actualmente se encuentra en torno a los 680 dólares por tonelada, lo cual lo ubica muy cerca de la capacidad teórica de pago de la industria (686 dólares por tonelada).
Para próxima cosecha se relevaron valores cercanos a los 550 dólares, indica el informe.
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