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El girasol argentino pide una oportunidad
27 de Septiembre de 2014El alto nivel de retenciones, combinado con factores climáticos y de mercado, ha obstaculizado en los últimos años la continuidad del liderazgo argentino en un cultivo emblemático.
El alto nivel de retenciones, combinado con factores climáticos y de mercado, ha obstaculizado en los últimos años la continuidad del liderazgo argentino en un cultivo emblemático. La cadena de valor, si bien pretende la eliminación total de este arancel, propone coyunturalmente reducir un 15% los derechos de exportación para incentivar la siembra.
Por Luis Arias, presidente de la Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR).
Tras una de las peores campañas de los últimos 40 años, el girasol aún espera medidas oficiales que permitan retomar el liderazgo que hace tan sólo unos pocos años enorgullecía a nuestro país. La superficie sembrada en el último ciclo osciló entre las 1,3 y 1,48 millones de hectáreas, resultando en una producción final de entre 2 y 2,3 millones de toneladas según las estimaciones de distintas fuentes.
Varias son las razones por las que hemos perdido el primer puesto entre los productores y exportadores mundiales de aceite de girasol. La mayor caída de área se produjo a principios de siglo, con el ingreso de la palma y el aumento de la cosecha de soja. Posteriormente, la adopción de tecnología y el consecuente aumento productivo de países de Europa del Este –principalmente Ucrania– nos transformó en un proveedor casi marginal.
Así, mientras que hacia el año 2000 nuestro país tenía una participación del 53% del comercio internacional de aceite de girasol y Ucrania solamente un 15%, hoy los números muestran una drástica inversión: Argentina cayó hasta el 8%, elevándose el país del Oriente europeo hasta el 55%.
Por otra parte, el rinde promedio, que en las tres campañas previas a la última se había logrado estabilizar en aproximadamente 20 qq/ha, cayó a 16,3 qq/ha. La sequía en el NEA y el golpe de calor de fin de diciembre y principios de enero pasados colaboraron en dicha disminución.
Sin embargo, si bien existen debilidades propias de la cadena y el cultivo se enfrenta a las amenazas y dificultades externas anteriormente señaladas, las mochilas más pesadas con las que carga el cultivo son la elevada carga tributaria y el 32% de derechos de exportación para el grano y 30% para el aceite y harinas, que frenan e impiden potenciar las fortalezas de la oleaginosa.
La Asociación Argentina de Girasol ha venido trabajando para resolver los principales problemas que enfrenta la cadena del cultivo, y a la vez ha acompañado a la mejora y optimización del uso de los recursos en los diversos eslabones que la componen, con trabajos que van desde su apoyo a proyectos de investigación en ciencia y tecnología, hasta la realización de gestiones para resolver trabas comerciales y barreras de acceso a los principales mercados.
Actualmente, desde la entidad estamos proponiendo, como un paso previo a la eliminación de dicho gravamen, una reducción del 15% en los actuales derechos de exportación, que representaría para el productor un ingreso adicional de unos 140 U$S/ha para un rendimiento de 20 qq/ha, mejorando así la competitividad del cultivo y fomentando la utilización de un mejor paquete tecnológico. En este escenario se podría incrementar el área, beneficiando a todos los eslabones.
Hoy la recaudación por retenciones al girasol significa menos del 1% del total de los derechos de exportación de productos agrícolas y sus derivados. La mayoría de los 3.000 a 4.000 productores de girasol –muchos de ellos pequeños y medianos– necesita seguir contando con las bondades y nobleza de este cultivo.
Las acciones a favor del cultivo se revelan urgentes si queremos proveer de volumen y escala de molienda a una estructura industrial que actualmente cuenta con una elevada capacidad ociosa, y que por ello ha enfrentado los primeros y lamentables cierres de plantas procesadoras de aceite, con la consecuente pérdida de fuentes de trabajo. La industria aceitera de girasol emplea a 2000 trabajadores según información de su gremio.
En conclusión, estamos convencidos de que el girasol debe mantenerse en el portfolio de los productores, principalmente en aquellas zonas de ambientes más adversos para la agricultura, que no tienen suficientes alternativas productivas, o en aquellas en las que cultivos sustitutos presentan marcadas variaciones interanuales en los rindes. Poder implementar una rotación sostenible entre cultivos cuyos períodos críticos se atraviesan en distintos momentos del tiempo permitiría disminuir el riesgo productivo y financiero en los años más complicados.
El previsible crecimiento en el consumo mundial de los aceites de más calidad tiene que encontrar a nuestro país como su principal abastecedor. Debemos recuperar el liderazgo perdido, y así volver a desempeñar un papel decisivo en la formación de los precios, permitiendo la continuidad sustentable de nuestro querido girasol argentino.
Los números del girasol
- En la campaña 2013/14 se sembraron entre 1,3-1,48 millones de hectáreas, con una producción de 2 a 2,3 millones de toneladas.
- La molienda fue de 1,95 M de toneladas, con 0,83 M de toneladas de producción de aceite.
- El consumo interno de aceite fue de 0,57 M de toneladas y se exportaron 0,26 M de toneladas de aceite.
- La producción de harina fue de 0,86 M de toneladas, el consumo interno es de 0,74 M de toneladas y la exportación de harina fue de 0,12 M de toneladas.
- La recaudación por retenciones fue de 91 millones de dólares representando 2,3 dólares por hectárea por cada punto de retención.
- Del total recaudado por retenciones del complejo agrícola, el girasol participa con menos del 1%.
- La cadena de girasol propone reducir en forma urgente los Derechos de Exportación, del 32 al 17%, para el grano y del 30 al 15% para harina y aceites de girasol.
- Bajar 15 puntos en las alícuotas implica aumentar la rentabilidad del productor, para un rinde de 20 quintales por hectárea, en U$S 140.
- La diferencia en los ingresos por retenciones sería entonces de 45,3 M de dólares, aproximadamente el 0,46% del total de recaudación anual por Derechos de Exportación al complejo agroindustrial.
Este artículo es parte del Especial Girasol publicado por LaNación.com con material elaborado por ASAGIR. Para ver esta nota: http://especiales.lanacion.com.ar/destacados/14/girasol/nota5.asp
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